El Barça, que este año ha tenido unas pérdidas cercanas a los 100 millones de euros, pagará 25 'kilos' por el holandés. Un viejo amigo de Ronald Koeman en la Selección y que, al igual que con Wijnaldum, intenta 'enchufar' en Can Barça. Eso sí, llama la atención que se hable de estos jugadores cuando la prensa culé se llena la boca con Mbappé, Lautaro, Mané y compañía. (Exclusiva DC: el Madrid, sobre el fichaje de Mbappé por el Barça: "Por este motivo, confianza total...")
Deben vivir en una realidad paralela ya que, a parte de que no pueden acometer estos fichajes, luego traen a futbolistas mediocres. La revolución de Can Barça pasa por jóvenes promesas como Miralem Pjanic, que en abril cumplirá 31 años (o la continuidad de algunos como Busquets, Alba y Gerard Piqué).
El colmo de todo esto es que el conjunto culé filtra a su prensa afín que intentarán pelear por Mbappé el año que viene. Se consideran serios candidatos a hacerse con el francés, que en ningún caso bajará de los 200 millones de euros. Tendrán que vender el estadio y pagar a Messi en bitcoins si no quieren hipotecar el club de por vida. (Esto lo taparán todos los medios: el mejor ejemplo de la ruina culé de Bartomeu).
No son capaces ni de quitarse de encima a Luis Suárez, que todavía no ha llegado a un acuerdo para salir. Seguro que a Leo Messi no le hará mucha gracia que su amigo y vecino, con el que comparte tanto tiempo libre, haga las maletas a otro país como Italia. Por no hablar de lo estrictamente deportivo, que compartirá terreno de juego con un Griezmann al que no traga desde que llegó.
Así las cosas, Koeman tendrá que resolver una buena papeleta en un club que, poco a poco, se desmorona. No tienen proyecto deportivo y lo único que 'tranquiliza' a los culés es que habrá elecciones en marzo. Mientras tanto, Bartomeu negociando ha conseguido ya cerca de 3 millones por Rakitic y Vidal, que en los próximos días se marchará al Inter.
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