Martin Odegaard llegó a Londres bajo la recomendación de su compañero y amigo Eden Hazard, como ya os adelantamos en DC. Desde que llegó al Arsenal ha estado ilusionado con el proyecto de Arteta, y es que actualmente lleva el dorsal ‘11’, lo que indica su gran importancia para el conjunto londinense.
Sin embargo, por ahora, Odegaard se ha llevado un golpe de realidad al ver que Arteta guarda ciertas preferencias con otros futbolistas. De momento, solo ha disputado siete minutos, pero para el encuentro de este sábado contra el Aston Villa espera tener la oportunidad de demostrar su talento.
Hay cierto miedo en esta cesión. En el Madrid no quieren ver a Odegaard en el banquillo, por eso esperan al igual que él una mayor cantidad de minutos en el próximo encuentro. El conjunto blanco tiene ciertas complicaciones a la hora de ceder futbolistas, no suele acertar. Con Kubo ya pasó algo similar hace apenas unas semanas.
Odegaard se marchó al Arsenal con la exclusiva razón de no ver los partidos desde la grada. Pero a día de hoy, su mente le dice que no es importante para Arteta. Quedan todavía unos meses para que finalice la temporada, y espera que poco a poco vaya siendo cada más relevante.
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