Según ha podido saber Defensa Central, el vestuario del Real Madrid ha comentado el partido entre el club catalán y el andaluz. Sobre todo, se ha hecho hincapié en el arbitraje.
La indignación ha sido importante debido a la poca trascendencia mediática que se le ha dado a las jugadas polémicas en las que el Barça salió beneficiado.
Los futbolistas del Real Madrid también han coincidido en que si hubiese estado el conjunto blanco en lugar del Barça si que se habrían repetido las imágenes decenas de veces y no quedarían en el olvido. (El doble rasero para ayudar al Barça: a Ramos le pitaron penalti por esto y a Lenglet no)
Ese doble rasero a la hora de abordar los temas arbitrales de merengues y culés es lo que más ha molestado a la plantilla del Real Madrid.
LAS JUGADAS POLÉMIAS DEL BARCELONA-SEVILLA
En el minuto 71, con 1-0 en el marcador, Mingueza cometió un penalti sobre Lucas Ocampos que el árbitro señaló sin dudarlo.
Sin embargo, a pesar de ser el último jugador y cortar una acción manifiesta de gol, el colegiado no le amonestó. En ese momento, Mingueza ya tenía amarilla por lo que debió ser expulsado.
Unos minutos después, el sevillista Fernando vio la segunda amarilla por un leve agarrón a un jugador del FC Barcelona. En esta ocasión, el árbitro si que le mostró la roja.
Ya en la prórroga, Lenglet tocó el balón con la mano dentro del área. El VAR revisó la jugada pero decidió no señalar penalti alegando que previamente toca el balón con el pecho.
Tres jugadas polémicas en las que el gran beneficiado fue el FC Barcelona, que logró el pase a la final de la Copa del Rey.
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