Si echamos la vista atrás observamos que en los clásicos celebrados desde la temporada 2000-2001, el conjunto blanco se ha quedado con un futbolista menos hasta en once ocasiones, mientras que el conjunto blaugrana tan solo en 7, una de ellas a Pinto que estaba en el banquillo, por lo que no dejó a su equipo con un jugador menos.
Cuando hablamos de partidos en los que hay futbolista tanta calidad, la expulsión de un miembro del once supone, en ocasiones, perder el partido. Los árbitros, a veces, condicionan un partido con expulsiones inexplicables, convirtiéndose en los protagonistas del encuentro.
Es una vergüenza: el saldo arbitral del Madrid tiene una diferencia abismal con el Barça desde 2004. El Barcelona, 61 y el Real Madrid, -11. (El Madrid comunica la lesión de Mendy y Odriozola está casi descartado para el Granada)
Michel Salgado, Figo, Roberto Carlos, Albiol, Di maría, Sergio Ramos, en dos ocasiones, Pepe, Özil y Marcelo. Son partidos con las emociones a flor de piel, los jugadores están a 200 pulsaciones y, en algunas ocasiones, el colegiado debería tener un poco más de sensibilidad a la hora de dejar a un equipo con uno menos.
En cambio, del Barça, solo Busquets, Xavi, Pinto que lo expulsaron estando en el banquillo, por lo que no dejó con uno menos a su equipo, Olegué Presas, Villa, Victor Valdés, ya con el partido finalizado por prortestarle árbitro, y Adriano Correia.
Además, esa diferencia también es patente en los penaltis señalados. Mientras que al FC Barcelona le han señalado muchísimos penaltis a su favor, al conjunto blanco, no.
Siete jugadores expulsados en los últimos 15 años de Madrid-Barça o Barça-Madrid. En cualquier competición, Liga, Copa del Rey, Supercopa de España y Liga de Campeones. Una diferencia bastante considerable con respecto a los once expulsados que ha sufrido el conjunto blanco a lo largo del siglo XXI.
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