A Zidane le gustó tanto lo que vio de su equipo en Granada que para Bilbao tocó lo imprescindible. Metió a Odriozola por el lesionado Marvin, el resto, lo mismo, es decir, con Hazard en el banquillo y con Miguel Gutiérrez como lateral zurdo.
El arranque de partido nos mostró a un Athletic que, aun sin jugarse nada en lo clasificatorio, pretendía dar guerra. Al Madrid le costó hacerse con el balón en los primeros 15 minutos del choque porque los de Marcelino presionaban muy arriba. De hecho, Casemiro cometió un error muy grave sacando el balón desde atrás que, por suerte, no generó peligro sobre la meta de Courtois.
Pasado ese arranque, el Madrid fue domando poco a poco a los leones. Eso sí, esa bajada de ritmo, con Modric y Benzema apareciendo más a la hora de tocar el balón, tuvo un doble capítulo arbitral que le quitó protagonismo por lo escandaloso de lo que se vio.
DOS PENALTIS ESCAMOTEADOS AL REAL MADRID
Y es que ni Mateu Lahoz en el campo ni Iglesias Villanueva, en el VAR, tuvieron narices a señalar alguno de los dos penaltis clarísimos que se produjeron en el área del Athletic.
El primero, una mano evidente Morcillo, despegada del cuerpo, que de haber sido en el área contraria seguro habría acabado en pena máxima. Mateu la vio pegada al cuerpo, mal, pero peor aún Iglesias Villanueva en el VAR, con 200 imágenes, y no mandando a su ‘colega’ al monitor.
No contentos con eso, al Madrid le escamotearon un segundo penalti minutos más tarde. Fue un falta absurda, pero clarísima. Un resbalón de Yeray en una carrera con Benzema terminó con el zaguero del Athletic llevándose por delante al delantero francés del equipo blanco. Absurdo, ingenuo, evitable…pero penalti claro. El segundo que le quitaban al Madrid en poco más de 30 minutos de juego.
Además del tema arbitral, el Real Madrid tenía un segundo problema, el no llegar a gol. Y es que su primer remate a portería no llegó hasta el minuto 56, con un golpeo desde fuera del área de Luka Modric, raso y muy pegado al palo, que se encontró con una gran intervención de Unai Simón. El equipo de Zidane necesitaba generar peligro, ocasiones y, sobre todo, algún gol.
La buena noticia para los blancos fue que ese primer intento de Modric pareció ser una especie de incentivo para que el equipo se lanzara con más insistencia hacia la meta rival. En una acción a balón parado, un córner tocado por Modric, Casemiro se encontró con el larguero en un remate de cabeza que estuvo a punto de convertirse en el 0-1. El Madrid había pasado de no tirar a puerta en 56 minutos a tener dos buenas ocasiones, siendo la segunda de ellas muy clara, en un intervalo de apenas cinco.
El Madrid se empezaba a acercar al gol. Las cosas habían cambiado, los de Zidane eran conscientes de que lo expuesto durante casi 60 minutos no les servía y lo siguieron intentando. Con más corazón que juego, con más fuerza que técnica, el equipo blanco encontró su premio. Casemiro, en un balón que quedó suelto en el área, puso el balón al segundo palo y allí apareció Nacho, que prácticamente de rebote, tocó el balón y lo introdujo en la meta local. Ese gol ponía líder al Real Madrid y tanto en el césped como en la grada se celebró por todo lo alto, incluido un Zidane que rompió sus manos en un aplauso sin fin.
Con el 0-1, el Madrid decidió volver a echar el ancla y contener. Zidane sacó a Hazard para tener más el balón y anestesiar a un Athletic que sufrió el gol. Por si esto fuera poco, los transistores daban otra de las noticias de la tarde. El Osasuna se adelantaba en el Metropolitano y le daba un terremoto a la Liga con vuelco en la cabeza incluido.
La mala noticia para el Madrid no llegaba en su partido, pero sí en el de su rival. Y es que los navarros no fueron capaces de aguantar ni siquiera el empate y acabaron perdiendo por 2-1. En la grada de los jugadores del Madrid cayó como un jarro de agua fría. No era lo esperado después de que los rojillos se hubieran puesto por delante, pero al menos, el equipo de Zidane mantuvo su victoria y, por tanto, llegará vivo a la última jornada para decidir el campeonato.
Ficha técnica
Athletic: Unai Simón; De Marcos, Yeray, Iñigo Martínez, Balenziaga; Berenguer, Dani García, Vencedor, Morcillo; Williams (Raúl García 65') y Sancet
Real Madrid: Courtois; Odriozola, Militao, Nacho, Miguel; Casemiro, Modric, Valverde; Rodrygo, Vinicius (Asensio 58') y Benzema
Goles: 0-1 Nacho (66')
Árbitro: Mateu Lahoz. Amonestó a
Estadio: San Mamés.
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