Es de las mayores injusticias: Camavinga se comió a Gavi en la pasada temporada

El '12' del Real Madrid dio un rendimiento más que notable y que ha quedado sin recompensa


CAMAVINGA GAVI

CAMAVINGA GAVI




La pasada temporada de Eduardo Camavinga es para enmarcar. El todocampista francés llegaba de un equipo de media tabla de la Ligue 1, sin apenas experiencia en las grandes instancias del fútbol continental y como fichaje sorpresa de última hora por 30 millones de euros. Aunque los ojeadores del Real Madrid coincidían en que era un fichaje más que prometedor, sobrepasó todas las expectativas.

Carlo Ancelotti sabía que Camavinga tenía un papel fundamental como revulsivo en el Real Madrid. Por eso, aunque siguió confiando en Casemiro, Kroos y Modric como titulares en los grandes partidos, el entonces '25' blanco tenía reservado un papel privilegiado en el esquema del italiano: fue fundamental en la revitalización del equipo en las remontadas del Bernabéu, esas mágicas eliminatorias en las que el francés aportó todo su conocimento futbolístico y su desparpajo juvenil para convertirse en un atacante más y dar salida a los chispazos que los de Ancelotti tenían en los minutos finales.

Con su técnica y control del balón teniendo tan solo 19 años, Camavinga enamoró al madridismo entero y fue coronado como uno de los héroes discretos de la Decimocuarta. Todo ello sin olvidar las fantásticas aportaciones en LaLiga, donde demostró en varios partidos que está perfectamente adaptado para ser titular y diferencial en todos los encuentros que pueda disputar. Este impresionante currículum, de alguna forma que ha sorprendido al mundo entero, no ha sido merecedor de un Golden Boy.

Un ridículo histórico... otra vez

El que sí lo ha sido, inexplicablemente, es el de Pablo Gavi, nuevo ganador de este trofeo. Aunque el '30' del Barça haya causado sensación, los logros son lo más importante en el mundo del fútbol. El joven azulgrana apenas se ha destacado para bien a nivel individual y colectivo, puesto que los de Barcelona no levantaron ningún título real la temporada pasada y fueron humillados en Champions League una vez más. Lo único que distingue a Pablo Gavi de los demás es su agresividad y brutalidad, que todavía no le cuesta la expulsión por conducta antideportiva y violenta.


Sus constantes agresiones, especialmente a los jugadores del Real Madrid, han tenido freno en el último Clásico. Gavi formó parte de una de las soluciones de Xavi al baño táctico que le estaba endosando Ancelotti en el Bernabéu, pero solo en el terreno de la violencia y la agresividad. Su única cualidad es ser un jugador excesivamente agresivo, pero encontró la horma de su zapato en Ferland Mendy, quien le anuló y le dejó en ridículo nuevamente después de un choque de hombros contra el lateral, en el que el '30' del Barça salió volando por los aires para regocijo del feudo madridista.