La directiva madridista ya está al tanto: Sergej Milinkovic-Savic es otro de los jugadores que se ha ofrecido al Real Madrid, aunque más discretamente que los últimos anuncios de jugadores como Josko Gvardiol o Roony Bardghji, uno de los últimos futbolistas en 'declararse' al club blanco. El centrocampista serbio lo ha hecho de forma indirecta, ya que está rechazando tajantemente todas las ofertas de renovación que el Lazio le está haciendo llegar.
Su vínculo con la entidad italiana finaliza en 2024, pero la directiva aquilotti considera que es un futbolista fundamental para el presente y el futuro del club. Milinkovic-Savic ha resultado ser uno de los mejores de la Sociedad Deportiva, pero la paciencia del serbio con el club se ha terminado por agotar: está buscando nuevos retos deportivos y, sobre todo, de un calibre mayor.
El Real Madrid es la opción número uno para el centrocampista, que podría contar con una ventaja a su favor para animar a la directiva blanca: que el fichaje de Jude Bellingham termine fracasando y el '22' del Borussia Dortmund se vista con la elástica red desde la próxima temporada. A pesar de las cábalas de Milinkovic-Savic, la directiva madridista ve las cosas de una forma diferente.
La situación se complica mucho
No hay prácticamente ninguna opción a que el serbio se enfunde la camiseta del Real Madrid desde la próxima temporada, ni siquiera para después de 2024, fecha en la que quedaría libre a no ser que renueve su compromiso con su actual club. Florentino Pérez y el resto de la cúpula de la entidad de Concha Espina saben que el único refuerzo posible para el centro del campo en este mercado de verano es Jude Bellingham.
Este jugador, la prioridad máxima para la junta directiva madridista, es el único que de verdad está en su agenda. Al menos en las posiciones de centrocampista. Mientras que en otras áreas de la plantilla hay cierta confusión, en el centro del campo el mensaje es claro: si no se ficha a Jude Bellingham, no se ficha a ningún otro futbolista más.
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