Los blancos eran conscientes del golpe encima de la mesa que podían dar con un fichaje como el de De Colo y se pusieron manos a la obra. El jugador estaba encantado con la posibilidad de jugar en el Madrid ya que su mujer, que es española, tenía cierta preferencia por volver a vivir en su país natal.
De Colo era uno de los jugadores mejor pagados de toda Europa durante su aventura en el CSKA por lo que el Madrid era consciente de que tendrían que hacer un gran esfuerzo por contratarle. De hecho, el jugador estaba dispuesto a perder algo de dinero para terminar jugando en el Palacio de los Deportes (El tiempo que le ha dado el Real Madrid a Thompkins para que adelgace)
Sin embargo, cuando todo parecía bastante encauzado, el Real Madrid se encontró con un problema de complicada situación, el Valencia Basket. Y es que los ‘naranjas’ seguían teniendo los derechos del jugador en caso de volver a jugar en la ACB, un movimiento que terminó siendo clave para que los blancos se retiraran de la operación. Según ha podido saber Defensa Central, el Valencia exigió cerca de 3 millones de euros para no acudir al tanto por De Colo y que éste terminara en el Real Madrid. Los blancos consideraron que la cifra era excesiva ya que si a ese ‘traspaso’ le tenían que sumar la ficha al jugador, la operación se iba por encima de los 10 millones de euros. Demasiado.
Cuando el Madrid le comunicó al jugador que no podría salvar el obstáculo del Valencia apareció en escena el Fenerbahçe. Los turcos irrumpieron con cerca de 3 millones de euros de ficha para el jugador y éste terminó aceptando la propuesta del equipo de Obradovic. Una vez más, el Valencia Basket, como ya ocurriera con Claver hace algunos años, se cargó el sueño de un jugador de fichar por el Real Madrid. La ‘madriditis’ no tiene cura.
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