El equipo blanco ha mostrado que realiza una labor espectacular en sus categorías inferiores y el objetivo final era ganar el torneo en una final preciosa ante el máximo rival como es el FC Barcelona.
El encuentro ha comenzado con el Real Madrid mejor plantado que el FC Barcelona y con la idea de juego muy clara: férreos en defensa y buscando la velocidad al contragolpe en ataque.
Pese a que el FC Barcelona era el dominador del esférico, el Real Madrid era el equipo que estaba teniendo las más claras las estaba teniendo el Real Madrid a través de su número '5'. Seguidamente, Manu Heredia tuvo en sus botas el 1-0 tras un genial pase en largo de Bryan Bugarín.
Pese a ello, la primera parte ha finalizado con empate a 0, con total igualdad en el partido aunque con mayor sensación de peligro por parte del club madridista que ha tenido dos jugadas claras.
Segunda parte sin miedos
En la segunda mitad, los dos equipos salían sin miedos y buscando el campo contrario. El Real Madrid ha sido el equipo que primero ha golpeado con un espectacular golazo de Eduardo Valentín.
El golazo que decidió la final:
El futbolista del Real Madrid se pedía una falta lateral y se mostraba totalmente convencido en probar suerte. El golpeo de empeine total era espectacular y se colaba por la escuadra del palo del portero, siendo un misil imparable.
El intento de réplica lo tenía el FC Barcelona en el minuto 29 de encuentro a través de las botas de su número '10'. El polaco lanzaba una gran falta al palo del portero, pero se topaba con una muralla como es el guardameta blanco, Guille.
Finalmente, el Real Madrid ha logrado defender la ventaja y ha acabado sin encajar ningún gol en el campeonato, siendo el justo ganador del torneo y alzándose con la novena Liga Promises.
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