La Champions en abierto corre peligro

Este martes se acaba el plazo para que los operadores españoles preseten sus ofertas para los próximos 3 años


Champions, Trofeo

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De nuevo el asunto de los derechos televisivos ataca al mundo del fútbol y en este caso a la competición de clubes más importante del mundo: la Champions League. Este martes concluye el plazo para que las diferentes plataformas televisivas aporten sus ofertas para la emisión de los próximos tres años, es decir del 2018 al 2021.

El proceso llamado Team Marketing, estudiará cada una de las ofertas aunque no es para nada descartable que la competición se emita sólo en canales de pago. La UEFA ha metido miedo a los operadores españoles la ver como han actuado en otros países como Inglaterra, Francia, Italia o Alemania, y es que en todos estos países se pagará por ver la Champions. Concretamente un 30% más, lo que hará que los clubes sean más ricos en comparación con el anterior trienio que iba desde 2015 hasta 2018. Aquí en España, la batalla en los despachos se presenta muy intensa: Mediapro quiere mantener los derechos, pero Movistar ha entrado fuerte con una oferta muy alta con la intención de quitarle el monopolio. Para la emisión de la pasada Champions, Mediapro pagó 120 millones, Atresmedia pagó 40 y TV3 16. Parece que de cara a la próxima temporada la idea es que Mediapro se quede de nuevo con el formato de pago y tanto Mediaset como TVE están interesados en dar un partido en abierto por lo menos.

Aún quedará por definir el futuro del fútbol en cuanto a la Champions se refiere, pero lo cierto es que los precedentes en el resto de Europa no son muy optimistas. En Alemania, será la primera vez en la historia en la que no se vea ningún partido en abierto, en Italia no hay Champions libre desde 2015 y en Inglaterra, BT Sports ha renovado su paquete de pago pero ha dejado sin resúmenes en abierto a otras cadenas previo pago de 345 millones de euros. El golpe más duro ha sido en Francia, donde una filial del grupo Altice se hizo con el control del fútbol previo pago de 350 millones, quitándose de en medio a Canal + y a beIN Sports.