Rubiales se juega el cargo por su pataleta contra Lopetegui

Los estatutos de la RFEF indican que el presidente no puede tomar una decisión como la que tomó 'de motu proprio'.


Lopetegui, Rubiales, España

Lopetegui, Rubiales, España




Según informa El Confidencial, José Ángel nchez telefoneó a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas para intentar encontrar algún aliado para evitar el dramático desenlace que finalmente se produjo. Nada más saber que Rubiales tenía la intención de despedir a Lopetegui, desde el club blanco se pusieron en marcha para intentar convencerle de que no lo hiciera. Así, el director general madridista habló con la vicepresidenta para asuntos de integridad, Ana Muñoz, para que mediara en favor de Julen.

La conversación entre Ana Muñoz y Rubiales se produjo, pero no hubo manera de hacer cambiar de idea al presidente de la RFEF, que a esas alturas estaba ya cegado por todo el ruido generado alrededor del fichaje de Lopetegui por el Real Madrid. De hecho, Rubiales actuó incluso asumiendo el riesgo de verse las caras con la junta directiva de la Federación, ya que tomó la decisión por su cuenta y teóricamente no puede hacer algo así, según los estatutos de la RFEF.

El artículo 35, punto 6b, indica que es competencia de la junta directiva el "designar, a propuesta del presidente, a los seleccionadores nacionales, así como al equipo técnico". Del mismo modo sucede, por tanto, con las destituciones. Rubiales, de este modo, tomó la decisión y sin tener en cuenta a nadie la ejecutó. Si la junta directiva de la RFEF quisiera meter en un lío a Rubiales, podría hacerlo. La cuestión es que ya desde la era Villar los seleccionadores han sido nombrados y despedidos a dedo. Nada ha cambiado en ese aspecto.