Zidane enviaba un mensaje con claras intenciones en su encuentro frente al Levante. El técnico galo no reservaba a ninguno de sus futbolistas y seguía manteniendo a Eden Hazard en el 11 para que cogiese rodaje de cara al encuentro de Champions League y el Clásico.
El equipo estaba necesitado de ganar para recuperar el liderato que había cedido a favor del Barcelona de manera momentánea. Dos puntos había de diferencia a comienzo del partido que han pesado como una dura losa a un Real Madrid con mucha falta de acierto.
Mendy era el único titular junto a Valverde que Zidane se reservaba. El primero era porque el lateral galo estaba apercibido de acumulación de tarjeta y el técnico decidió no arriesgar. El caso de Valverde es más flexible porque todos los centrocampistas están contando con una gran cantidad de minutos, aunque Modric podría ser el sacrificado para el Clásico.
La lesión de Hazard fue la peor noticia sin duda del encuentro. La derrota fue un duro golpe pero la lesión del belga era sin duda lo más duro de la noche en una semana vital para los intereses blancos. Las palabras de Emilio Butragueño eran más tranquilizadoras diciendo que era un golpe en el tobillo pero queda pendiente de evolución.
Los cambios se produjeron tarde sacando a Vinicius, Lucas y Valverde que son los futbolistas que suelen acelerar los partidos. Estos cambios podrían ser una pista ante los posibles relevos que puedan partir de inicio, especialmente el uruguayo, que será titular en Champions y en el Clásico.
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