Según ha podido conocer Defensa Central, James y Zidane mantuvieron una breve charla en Valdebebas tras el Clásico. El colombiano asumió que está por detrás de otros jugadores como Isco o Valverde, pero le prometió al técnico que se iba a entrenar lo mejor posible para volver a entrar en las convocatorias. De alguna manera, puede decirse que ha estado 'a prueba' desde principios de la semana.
Y la ha superado con creces. El ex del Mónaco le ha demostrado a Zizou que todavía tiene mucho fútbol en sus botas. Se ha contagiado de la buena dinámica de sus compañeros tras ganar al Barça. El caso de Mariano le hizo replantearse su situación y, por ello, quiso explicarle al entrenador del Real Madrid que iba a dar lo mejor de sí mismo en los entrenamientos para contar con más oportunidades.
La próxima puede darse el domingo en el Benito Villamarín. Para sorpresa de muchos, ha entrado en la convocatoria de Zidane. Y no es un partido cualquiera. A pesar de que el conjunto andaluz no atraviesa un buen momento, están necesitados de puntos. Rubí está en la cuerda floja y, como siempre, ganar al Madrid supondría una inyección de moral en el vestuario bético.
Zizou es consciente de ello y, para evitar sorpresas, mantuvo una reunión de quince minutos con sus jugadores en Valdebebas: "Es un equipo que nos pondrá en dificultades y no podemos confiarnos. No sirve de nada ganar el Clásico si después nos dejamos puntos aquí". Y es cierto. En partidos como el del Villamarín se ganan y se pierden Ligas. (Noticia DC: el duro aviso de Zidane al vestuario para el duelo con el Betis).
Según las circunstancias del partido, es probable que James tenga minutos contra el Betis. Es un jugador desequilibrante que, en una jugada puntual, puede filtrar un pase ganador. Además, se le da bien este rival. En 2015 cuajó su mejor actuación con la camiseta del Real Madrid marcando un gol de chilena y otro de falta directa a los andaluces.
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