El Real Madrid vivió ayer por la mañana uno de los momentos más tensos cuando fueron informados del positivo de su compañero Trey Thompkins por COVID19, y por consecuencia, ellos tenían una gran posibilidad de estar contagiados.
Todo ocurrió mientras se disponían a entrenarse en la Ciudad Deportiva. Un entrenamiento que finalmente no pudo producirse debido a las advertencias de seguridad de los médicos del club, que obligaron a los jugadores a desalojar el recinto.
La cuarentena, que llegaba de imprevisto a los jugadores del primer equipo de fútbol y baloncesto, ponían en vilo al mundo del deporte, pues acto seguido se suspendió La Liga, y esta mañana se hacía oficial la suspensión de las competiciones europeas.
Sin embargo, si hay un día que los madridistas no olvidarán en la Ciudad Real Madrid es el de ayer, cuando los médicos les alertaron de lo que sucedía, asegurando que ellos eran un claro riesgo de contagio. (Las portadas del mundo del fútbol se vuelcan con el coronavirus)
“Chicos, tened mucho cuidado”, advertían a los jugadores y al personal, pues el haber estado en contacto directo con Thompkins les hacía estar en peligro: “Habéis estado en claro riesgo de contagio”, eran las palabras de preocupación que circulaban en el ambiente.
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