Eden Hazard ha sido uno de los grandes beneficiados (el otro ha sido Asensio) de este parón obligado por el virus que acecha en nuestras vidas. El belga ha visto como evoluciona, muy favorablemente, y su regreso al campo se podría producir al compás, prácticamente, de retomar las competiciones.
Se llevó un mazazo terrible. Volvió a alto nivel, tal y como se fue, y cayó lesionado ante el Levante a pocos días de medirse a Manchester City y FC Barcelona. El fútbol le debe una a Eden. La mitad ya se la ha devuelto al aplazar una Eurocopa 2020 que se iba a perder, casi con total probabilidad, tras pasar por quirófano.
Precisamente, en Dallas le pilló el inicio del COVID-19 exportado a Europa, África y Sudamérica. Allí renovó ánimos, con el doctor Eugene Curry, y allí empezó a cimentar el carpetazo final del asunto. La idea pasaba por cicatrizar y buscar un nuevo método de rehabilitación... con el claro objetivo de recortar tiempos.
Hazard, confinado en su casa como todos, se prepara y está totalmente enfocado en su vuelta al césped. Poco a poco va quemando etapas y empieza a visualizar con optimismo, rodeado de un fisio de la selección de Bélgica, el gran objetivo. (Noticia DC: las 2 razones de Benzema por las que el Madrid fichará otro ‘9’)
Eden quiere estar preparado para Zidane para cuando le toque regresar al campo. Su reto es llegar a finales de mayo, en las últimas semanas, para apuntarse a la recta final de Liga y de Champions League, cuando se restablezca la normalidad en el mundo del fútbol, tal y como confiesan desde el entorno del crack de La Louviere a Defensa Central y corroboran desde el propio club blanco.
Los tiempos reales de la competición, lógicamente, estarán amedrentados por el freno del coronavirus. El Real Madrid espera tener luz verde para jugar a partir de mayo y sabe que podrá contar con Eden Hazard en el tramo más importante del curso.
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