Hasta que se mude definitivamente a su domicilio, Camavinga lleva alojado desde que aterrizó en la madrugada del pasado día 8 cuando fue presentado en un hotel ubicado muy cerca del Santiago Bernabéu.
El joven jugador está viviendo sus primeros días como madridista con mucha ilusión y sin dejar de disfrutar ni un momento. La afición ya le está dando su cariño y Camavinga sabe reaccionar a los detalles afectivos de sus fans.
Como es habitual en cualquier crack merengue, el mediocentro se está sacando infinidad de fotografías con los seguidores del fútbol acostumbrándose a lo que significa ser jugador del Real Madrid.
En la tarde ayer, vivió una situación un tanto graciosa que se suma a su libro de anécdotas vividas en la capital. El internacional francés atendió a los fans que le pedían fotos y luego se fotografió él solo para uno de los viandantes.
Eduardo Camavinga se extrañó de que un aficionado fotografiara a su pareja junto al futbolista y no le pidiera posteriormente una imagen para el recuerdo donde aparecieran los dos. (Camavinga, tranquilo: sabe que sus oportunidades en el Madrid llegarán pronto).
Ante esta situación, el individuo que paseaba a las puertas del hotel donde está alojado el madridista le pidió que posara para él para tener una instantánea de Camavinga sólo.
El jugador supo reaccionar con simpatía a esta propuesta y obedeció la petición del seguidor. Con esta acción, Camavinga deja en evidencia su buen sentido del humor y se gana a la afición.
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