El acuerdo entre Girona y Real Madrid se ha producido con la política de fichajes habitual de los últimos años, vendiendo únicamente el 50% de los derechos del futbolista.
Además, el club blanco se ha reservado una opción de recompra, siendo el primer equipo en tener derecho de tanteo. Por su venta, ha recibido una compensación económica discreta.
Pero sin ligar a dudas, el negocio de la operación no está ahí. El Girona ha puesto a Miguel Gutiérrez una cláusula de rescisión de algo menos de 40 millones de euros, una suma considerable.
Esto deja al Real Madrid en una buena posición, puesto que si el club catalán decide vender al canterano madridista, el club blanco se embolsaría una cantidad que oscilaría los 20 millones de euros.
Además, el Real Madrid permite que uno de sus jugadores más prometedores se desenvuelva en Primera División y en caso de triunfar, poder recomprarlo como pasó con Dani Carvajal.
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