Uno de los fichajes en los que Florentino Pérez lleva trabajando mucho más tiempo del que parece es Alphonso Davies. La compleja situación de Ferland Mendy en el vestuario del Santiago Bernabéu, pese a que Carlo Ancelotti se opone tajantemente a su salida, ha propiciado que la dirigencia madridista se fije en el lateral zurdo canadiense como parte del relevo generacional.
Para continuar adelante con este plan, los ejecutivos blancos han entablado diferentes conversaciones con el entorno del futbolista norteamericano durante el último año y medio para conocer su situación en el Bayern de Múnich. Las cosas, desde entonces, han cambiado mucho: en Inglaterra tienen la muestra más clara.
La eliminatoria de Champions League entre Arsenal y Bayern de Múnich está sorprendiendo a todos en la entidad gunner. El partido de ida, celebrado en el Emirates Stadium, terminó en un 2-2 que deja todo abierto para la vuelta en el Allianz Arena. Pero todos en el norte de Londres no podían hablar de otra cosa que no fuera Davies: más ‘apagado’ de lo habitual y sin la chispa que se le presupone jugando al fútbol.
¿Cuestión de tiempo?
Ese Alphonso Davies estaba lejos de ser el explosivo lateral del que les habían advertido cuando se anunciaron los cuartos de final. Este pequeño bajón de rendimiento del propio Davies está en sintonía con la delicada situación deportiva que vive el Bayern de Múnich: no son candidatos a ganar ninguna de las competiciones nacionales de esta temporada.
Los constantes intentos de renovación enviados desde las oficinas de Säbener Straße no han tenido efecto. La dirigencia bávara ha terminado por resignarse: saben que en algún momento tendrán que sentarse para negociar con el Real Madrid el tránsfer por Davies. El objetivo es que la situación de desconfianza y desapego que vive el futbolista no se alargue más de lo necesario: también está afectando al rendimiento del grupo en este sprint final.
DEJA TU COMENTARIO