Se equivocaron, y en el fondo lo saben. En los últimos años ha habido varios jugadores que abandonaron el Real Madrid en busca de ser titulares indiscutibles o de más dinero. Dejaron el club blanco en busca de un sueño que en ninguno de los tres casos se ha cumplido. Puede que económicamente sí les haya ido mejor, pero en lo que se refiere al tema deportivo todos salieron perdiendo. Han ganado menos títulos de los que podían haber ganado en el Bernabéu y además su rendimiento no ha sido el mismo lejos de la entidad presidida por Florentino Pérez.
Empezando por Álvaro Morata, el último en abandonar el barco merengue en busca de un mayor protagonismo. El canterano se sintió maltratado por Zidane respecto a Benzema la pasada temporada y por eso decidió abandonar el club blanco con dirección al Chelsea. Ahora, está atravesando una racha negativa que le ha llevado a perder la titularidad y no sólo eso, sino que además peligra su presencia en el próximo Mundial de Rusia… Sus 13 goles en 39 partidos no son la mejor carta de presentación. ¿Habría pasado lo mismo en el Real Madrid? No hay que olvidar que en el club blanco jugó 43 encuentros e hizo 20 goles la pasada temporada.
Özil y Di María, casos muy similares
Antes que Morata, abandonó el Real Madrid el argentino Ángel Di María. Al Fideo, que se marchó tras conseguir la Décima con el club blanco, es al que mejor le ha ido de los tres. Se marchó después de haber jugado 52 partidos en su última temporada, con 11 goles y nada menos que 26 asistencias. Sin embargo, su paso por el United no fue satisfactorio y un año más tarde firmaba por el PSG. Con el club francés lo ha ganado todo a nivel nacional, pero tampoco es titular indiscutible y en Europa ha vivido fiasco tras fiasco, este año ante sus propios ex compañeros.
Finalmente, Mesut Özil dejó el Real Madrid en 2013 por una cuestión económica para recalar en el Arsenal, donde no ha conseguido ningún gran éxito. En su última temporada con el club blanco, el futbolista alemán jugó 52 partidos, marcó 10 goles y repartió 24 asistencias, números que no ha conseguido igualar en Londres. En su mejor año goleador marcó 12 goles, pero nunca ha encontrado un socio igual a Cristiano, que le convirtió en el mejor asistente de Europa. Queda demostrado que, aunque hay vida después del Real Madrid, es una vida peor…
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