Cuando decimos que al Real Madrid le enoja y de qué manera ser carne de rumores a manos de agentes interesados en mover a sus futbolistas no es solo una simple teoría, sino el sentir absoluto de una entidad donde no comprenden las mañas de un mercado que ni siquiera a abierto sus puertas y ya usa el nombre de la entidad por todo lo alto. Basándonos en lo dicho hasta aquí, así sería el once de Carlo Ancelotti para el próximo año si se confirma lo de Karim Benzema y los fichajes arriba.
Quedan 90 minutos de temporada, un duelo ante el Athletic Club de Bilbao que puede ser más especial que nunca y el devenir de diversas operaciones que por supuesto se roba la entidad del club por estas horas, pero el mercado va incluso por delante de las acciones de Florentino Pérez y compañía.
Las redes sociales sirven en este tipo de situaciones para entender como la rumorología se vende mejor que los hechos, como el usar el nombre del Madrid parece gratuito por estas fechas y por encima de todo, que nombrar a la entidad significa dinero tanto para periódicos como agentes. Si todo fuese como lo vemos en la web, Ancelotti tendría un problema sideral y no precisamente por KB9.
Un mar de rumores
“La alineación del año que viene según la prensa”, dicta la imagen de la discordia y donde por supuesto vemos a todos los nombres que ya tienen titulares en los medios junto al Real Madrid. Lautaro Martínez, Harry Kane, Kylian Mbappé, Julián Álvarez y hasta Roberto Firmino se cuelan en un montaje que por supuesto no es viable, pero que ejemplifica lo que ahora mismo significa el club para los tiempos que vivimos.
La rumorología y los muchos nombres que han sido colocados en la órbita del Real Madrid para la delantera de la temporada 2023/2024 generan un huracán muchas veces ficticio, que refleja el enojo del club puertas afuera de Valdebebas y como el sin importar lo que llegue como refuerzo, quienes creen en las cuentas falsas de Twitter van a terminar desilusionados. No solo el futuro de Karim Benzema es un problema para Carlo Ancelotti en los tiempos que corren.
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