La historia que hay detrás del gol de Asensio: lágrimas, superación y final soñado

El mallorquín ha tenido que atravesar uno de los momentos más delicados de la carrera de un futbolista hasta que, por fin, 330 días después, volvió a jugar y marcó en la primera que ocasión que tuvo.


Marco Asensio

Marco Asensio




Es una de las lesiones más graves que puede sufrir un futbolista a lo largo de su carrera. Exige un largo proceso de recuperación, de casi un año, y un complicadísimo trabajo diario para recuperar la movilidad. Asensio fue operado, estuvo meses moviéndose en muletas, y viendo los partidos de su equipo por televisión. Lo peor para él fue ver cómo sus compañeros se entrenaban a diario en el campo de fútbol de Valdebebas, mientras que, lógicamente, él tenía que hacerlo en el interior de las instalaciones alejado del grupo. (Asensio desveló lo que sintió después de volver a lo grande).

Ejercicios en piscina, masajes en la zona, estiramientos, ligeras carreras continuas... estos fueron algunos de los entrenamientos que el balear siguió para recuperarse. El balón fue lo último que entró en escena, en pleno invierno, y hasta el propio Hazard bromeaba con él: "Marco, el fútbol es con el balón. No sólo carrera, carrera..." 

El propio Florentino Pérez estuvo muy atento a la progresión de Asensio y mantuvo contacto permanente con él para conocer su estado: "No hay que tener prisa tampoco Marco, esto lleva su ritmo..." Es una de las joyas del Real Madrid y su lesión sentó como un auténtico jarro de agua fría. El club tiene mucha confianza depositada en él y, cuando se enteraron del alcance, pusieron todos los instrumentos necesarios para que se recuperase lo mejor posible. 

Su cuerpo respondió bien en todo momento y no hubo contratiempos. La pandemia que sacudió al planeta (y que aún sigue estando en las calles), en parte le 'favoreció' para seguir recuperándose y llegar en óptimas condiciones para cuando se reanudase la temporada. Entrenó desde el día 11 de mayo como uno más y, 330 días después, Zidane le dio la oportunidad de jugar contra el Valencia. 


Apenas necesitó 30 segundos, en el primer balón que tocó, para demostrar que Asensio sólo sabe volver por la puerta grande. Está tocado con una varita. Su gol emocionó a todos (compañeros, entrenador, staff técnico, familiares, madridistas y, cómo no, al propio Marco). Un futbolista único, que ya está de vuelta, y que tiene todas las condiciones para triunfar en el Real Madrid.