"Cuidado, que es nuestro, no le vayáis a lesionar", dijo el presidente del Real Madrid en algún momento del partido cuando Kubo recibió una entrada 'fuerte'. A pesar de que los pupilos de Zidane saben que es propiedad del club blanco, ahora está defendiendo otra camiseta y no hay miramientos. Igual que la semana pasada con Odegaard, al que lograron neutralizar durante todo el partido.
Kubo fue el jugador más desequilibrante del Mallorca y realizó varias jugadas propias de un futbolista único. Es evidente que reúne todas las cualidades para triunfar en Europa. Ya sea en el Real Madrid, si consigue hacerse con un hueco dentro de unos años, o en cualquier otro equipo. No obstante, la entidad de Concha Espina cuenta con él y le consideran una pieza elemental para el futuro. (Exclusiva DC: el Madrid y Kubo tenían un gran 'enfado' antes de enfrentarse).
En el palco del estadio Alfredo Di Stéfano se quedaron absolutamente maravillados tras la jugada que hizo en el minuto 61. El japonés desbordó a Kroos con una facilidad tremenda y le hizo una 'croqueta' a Sergio Ramos que le plantaba solo ante Thibaut Courtois. Después apareció Ferland Mendy, que casi le roba el balón, pero aún así se lo llevó Kubo. Golpeó con la pierna derecha, su menos buena, y la mandó al lateral de la red.
Kubo es una de las grandes apuestas del Real Madrid de cara al futuro. De ahí la 'preocupación' de Florentino Pérez porque no se lesionara. Lógicamente, tal y como nos confirman fuentes cercanas al club, fue en tono de broma. "Bromeó con ello, pero fue de este tipo de bromas que las dices medio riendo, medio en serio". (Kubo dio razones de sobra para formar parte en el Madrid del futuro).
Habrá que esperar para ver si, cuando finalice LaLiga, Zinedine Zidane cuenta con él para la pretemporada. En caso de que así sea y le convezca, su decisión estará igualmente condicionada por las plazas de extracomunitarios. A día de hoy, el Real Madrid las tiene todas ocupadas (Vinicius Jr, Rodrygo Goes y Eder Militao). Por ello Reinier tiene ficha con el filial y Kubo, por más que gustase a Zidane el verano pasado, tuvo que marcharse cedido...
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